Los sucesos violentos provocados estos días por la segregación por sexos que intentan imponer judíos ultraortodoxos en la localidad de Beit Shemesh y otras zonas del país, han atraído la atención internacional sobre este tema. Ser mujer en Israel es difícil, incluso asfixiante. Unas se enfrentan a la objeción de conciencia militar, otras a discriminaciones laborales, muchas a presiones religiosas o malos tratos.